25 de agosto de 2013

Metalurg Zaporizhya y el ascenso del millón de dólares

apocalypse.jpgLanzamiento de sillas y bengalas durante el Sevastopol vs. Dnipro el pasado sábado.

La mano de Kuznetzov. El 24 de mayo de 2012 FC Sevastopol y Metallurg Zaporizhya se enfretaron en un partido determinante para el ascenso en la penúltima jornada de la Persha Liga, segunda categoría del fútbol ucraniano. Ambos son equipos con tradición en la élite ucraniana y habían descendido la temporada anterior. El caso del Sevastopol fue especialmente frustrante: en la última jornada cayó 0:1 ante el Tavriya Simferopol -su gran rival de la Península de Crimea- mientras que el Illichivets Mariupol remontó dos goles en la segunda mitad al Dinamo de Kiev para conseguir los tres puntos y una permanencia contra pronóstico resuelta por la difencia de goles general. Con el Goverla de Uzhgorod ya virtualmente ascendido como campeón, el encuentro en Sevastopol era totalmente decisivo. El Metallurg Zaporizhya ocupaba la segunda plaza de ascenso con 73 puntos, y el Sevastopol era tercero con 72. En caso de un hipotético empate a puntos al final de la temporada, el gol average general resolvería el ascenso a favor del Metallurg Zaporizhya. El Sevastopol necesitaba ganar. La controversia se produjo en el minuto 75 con 1:1 en el marcador cuando el delantero Sergey Kuznetsov marcó con la mano el gol que daría la victoria y todas las opciones de ascenso al Sevastopol (vídeo). A la reacción de los jugadores del Metallurg sobre el campo se unió la de los aficionados del Sevastopol, que lanzaron sillas y bengalas al sector donde se ubicaban los seguidores del Metallurg (vídeo). Kuznetsov reconoció que remató con la mano (vídeo) y desde entonces es apodado “el Maradona ucraniano”. Las imágenes y la polémica posterior al encuentro predominaron en los medios de comunicación en Ucrania.

El oligarca y la Bukovina. El decisivo gol antirreglamentario y la agresión a sus seguidores desataron la indignación en el Metallurg Zaporizhya. Durante la semana el escándalo se convirtió en una cuestión de todo el fútbol ucraniano y el Metallurg envió una carta abierta [1] al Presidente de la Federeción Ucraniana, Igor Surkis, invitándole a interceder a favor de la justicia (del Metallurg) o tener el valor de dimitir. La invocación también se extendió al supervisor de los árbitros de Ucrania, Pierluigi Collina. La respuesta de Surkis fue cruzarse de manos aludiendo que la UEFA no permite rearbitrar los partidos. Entonces entró en escena Igor Kolomoisky, oligarca de la región de Dnipropetrovsk, propietario del Dnipro y segunda fortuna de Ucrania que había sido frenado por el gobierno de Kiev en su expansión por la región económica del Prydneprovsk, que incluye las regiones administrativas de Dnipropetrovsk y Zaporizhya. Monopoly. Kolomoisky también se había convertido en enemigo del centralismo que representaban de los hermanos Surkis [2] en las asambleas de la Federación Ucraniana y había liderado la crítica a Collina y el estamento arbitral denunciando sistemáticamente una persecución hacia el Dnipro. En un calculado rol de justiciero y benefactor, Kolomoitsky tomó partido en favor del Metallurg Zaporizhya y ofreció en su canal de televisión un millón de dólares de prima a los jugadores de la Bukovyna a cambio de no perder en la última jornada ante el Sevastopol (vídeo). La Bukovyna ya no tenía objetivos y como la mayoría de equipos de la Persha Liga había atravesado problemas económicos durante la temporada. Un empate o una victoria de la Bukovyna ante el Sevastopol combinado con la victoria del Metallurg supondrían el ascenso al club de Zaporizhya. El desenlace de la última jornada el 30 de mayo en Chernivtsi remarcó cualquier obviedad. El Sevastopol logró adelantarse en la primera mitad cuando el mítico Lewandowski (ex Shakhtar) convirtió un penalti. Pero la Bukovyna no dejó de perseverar y consiguió el empate en el minuto 51. Semenyuk corrió eufórico hacia la grada tras marcar ese gol que les mantenía en la sexta posición (vídeo). A partir de ahí el Sevastopol se volvió a bloquear como un año antes contra el Tavriya. Paralelamente el Metallurg Zaporizhya ganó 4:2 al Helios. Este partido terminó cinco minutos antes y los jugadores del Metallurg se abrazaron mirando el videomarcador esperando el final entre Bukovyna y Sevastopol (video). El Metallurg ascendió y la Bukovyna cobró el millón de dólares [3]. Las suspicacias aumentaron en verano: Andrey Kurgan -socio de Kolomoisky- se convirtió en propietario del Metallurg Zaporizhya…

Venganza en Bakhchisaray. Sevastopol, Metallurg Zaporizhya y Dnipro Dnipropetrovsk coinciden esta temporada 2013-14 en la Ukrainian Premier League. El Sevastopol completó el ascenso en una segunda tentativa excepcional, y el Metallurg Zaporizhya terminó la 2012-13 en última posición pero la desaparición del Krivbas y la renuncia del Stal Alchevsk le mantuvieron en la categoría en por decisión federativa. El 9 de agosto el Sevastopol visitó al Metallurg en Zaporizhya. Los seguidores cosacos recordaron durante la semana los incidentes de 2012 (vídeo). Alertados los ultras del Sevastopol y la policiía, el partido solo será recordado por el golazo de Symonenko y una brillante remontada local (2:2). El último episodio tuvo lugar la semana pasada en Bakhachisaray cuando el equipo de Igor Kolomoisky visitó Sevastopol. En minuto 55 y con empate 1:1 en el marcador, una espectacular acción coordinada resultó en un masivo lanzamiento de bengalas y sillas desde el fondo que defendía el Sevastopol hacia los jugadores del Dnipro (vídeo). La escena la completaba un ultra que  con la cara tapada y una bengala en la mano caminaba desafiante sobre una visera del estadio, y otros que lanzaban más bengalas desde un montículo anexo al Sport Complex de Sevastopol. El partido estuvo parado casi diez minutos. En la rueda de prensa Juande Ramos declaró “Esto no es fútbol, esto es un circo”. Y así se vengaron en Sevastopol del dinero de Kolomoisky. Esto es Ucrania.
___________
[1] Carta abierta a Grigory Surkis - Ole.org.ua
[2] Grygory Surkis fue presidente del Dinamo Kiev entre 1993 y 1998. Entonces dejó el cargo a su hermano Igor (actual presidente del Dinamo) para ser presidente de la Federaciín de Fútbol de Ucrania hasta 2012. Durante el siglo XXI la contradicción que representaban ambos hermanos como presidentes de la Federación y del Dinamo colisionó con los intereses de los clubes emergentes de Ucrania: Shakhtar Donetsk, Metalist Kharkiv, Dnipro Dnipropetrovsk y Karpaty Lviv.
[3] Hay justicia: el dinero de Kolomoisky déjà al Sevastopol en Primera – LB.ua

No hay comentarios:

Publicar un comentario